Tener confianza en sí mismos, generar confianza en otros, comunicar eficazmente y relacionarse adecuadamente constituyen necesidades, cada vez más imperiosas, para aquellas personas que por motivos profesionales, o en razón de su cargo, tengan que relacionarse y comunicarse con otras personas.

Al mismo tiempo, comunicarse y gestionar relaciones en público de una forma adecuada son algunas de las actividades que más temor y tensión provocan en la mayor parte de los seres humanos.

Son muchas las personas que se bloquean cuando tienen que presentarse ante clientes o personas de alto nivel profesional, o cuando tienen que pronunciar unas pocas palabras ante un grupo de personas, incluso cuando estas personas son de su propio equipo.

El problema principal reside en la falta de confianza en uno mismo y la causa básica del miedo es la falta de método y, muy especialmente, la falta de preparación. Muchos profesionales nunca han perdido completamente el temor al presentarse ante otras personas, e inclusive podemos señalar que un poco de miedo es conveniente porque ello nos llevará a preparar mejor nuestras entrevistas y gestiones profesionales y a dar a nuestros interlocutores la atención y el respeto que merecen.

A tales efectos, es necesario potenciar la confianza en uno mismo y predisponer nuestra mente para el éxito en nuestras relaciones y comunicaciones, y ello se consigue transmitiendo con sinceridad, sencillez y entusiasmo en el mensaje que queremos difundir.