“Dicen que la genética tira. Quizá sea por eso, por algún gen común, por lo que desde 1845 todos en esta familia «vivimos el vino». Él es el que manda en nuestra casa, en nuestra Bodega.
Nos apasiona nuestro trabajo y para nosotros es un reto constante y un privilegio enorme estar al frente de Bodegas Ochoa.
Tenemos una filosofía sólida y clara basada en el respeto al medio ambiente. Cuidamos nuestra tierra, nuestras vides y nuestras uvas para obtener de ellas lo mejor.
Somos innovadores pero siempre desde una perspectiva respetuosa con la naturaleza. Por eso estamos en un proceso de transición a ecológico de nuestro viñedo. Es la mejor manera, mimar la viña para que ella nos responda una uva de máxima calidad para elaborar nuestros vinos.”
Esta es la tarjeta de presentación de BODEGAS OCHOA. Dicen de si mismos que “VIVEN EL VINO” y es verdad.
Cada vez resulta más difícil diferenciarse en cualquier sector y el mundo del vino no se libra de ello pero Bodegas OCHOA sin duda lo consigue y la clave una vez más vuelven a ser las personas que lo conforman.
Una familia que lleva seis generaciones unida por una pasión, elaborar vino. No es fácil ir a un lugar y ver que ciertos valores revolotean en el ambiente. Los valores no pueden ser impostados, o son los reales o no lo son y en OCHOA se respira, CERCANÍA, HONESTIDAD, CARIÑO, AFÁN DE MEJORA, CURIOSIDAD y TRABAJO DURO.
Os quiero felicitar y desear que sigáis pasando el testigo a nuevas generaciones tal y como sois ahora.