LA CULTURA DE SEGURIDAD ES CUESTIÓN DE LIDERAZGO Y ACTITUD


La prevención y la seguridad de una empresa no pueden y no deben ser algo residual que se aplica para “cumplir un expediente”, para no recibir sanciones o simplemente para decir a otros que “lo hacemos”.
La cultura de prevención y seguridad debe ser algo que se respira en cuanto se cruza el umbral de una organización porque se cree en ella y para ello resulta imprescindible que las personas se sientan partícipes de la realidad y de las soluciones que puedan ser requeridas.
Cuando la prevención es cuestión de obediencia no va a funcionar. La prevención y la seguridad deben ser vividas como una responsabilidad de todos y todas porque a todos nos afecta.
Con frecuencia conozco a responsables de “Seguridad, Salud y Medio Ambiente” que viven su función como llaneros solitarios que se enfrentan a la ejecución de su función solos o solas, sintiéndose perseguidores de la aplicación de normas porque no sienten el apoyo desde la estrategia.
Cuando la seguridad es parte del proyecto de la empresa y eje principal de la cultura suele ser porque la gerencia asume el reto en primera persona e implica a todos los mandos de la empresa en el liderazgo de ese proyecto.
El reto consiste entonces en que los líderes se sientan responsables de la seguridad de cada persona de su equipo y que cada persona de la organización se sienta responsable de su seguridad y de la de sus compañeros y compañeras.
De nuevo la seguridad no la hacen las normas, sino las personas. Por eso me ha gustado encontrar en ZF Group Pamplona, tantas personas (desde la gerencia y la dirección de seguridad y salud hasta todos los responsables de personas) que de verdad creen en la seguridad.
De corazón os digo que sois un ejemplo a seguir en fondo y forma. Gracias